Muchas veces he tenido que recurrir a esta planta, que es conocida también con el nombre de sábila.
Sus hojas pulposas al rasgarlas con un cuchillo, dejan ver una pasta húmeda cristalina que es un verdadero milagro para la piel!
Pregunta a tu dermatólogo antes si tienes una piel alérgica y sensible; aunque este es mi caso, yo siento un verdadero alivio cuando me hago una máscara de pocos minutos con el interior de sus hojas. Me deja la piel hidratada, la renueva y refresca.
Hago una máscara para la cara cada 15 dias, dejo que haga efecto cinco minutos y la retiro completamente con agua tibia sin frotar, para no borrar el efecto tan agradable que consigo.
Muchas cremas y tratamientos de belleza sobretodo de marcas «Bio» son hechos a base de esta planta y en caso de quemaduras de sol y superficiales, cubrir la zona con los cristales, te quitará el dolor y la sensación de calor.
Y no olvides el cabello…unas gotas de aceite de oliva o de aceite de argán mezclados con cristales de sábila, durante 20 minutos, le devolverán el brillo y la suavidad.
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Buen dato!!
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